Bufete

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Historía

A mediados de los años noventa, Gonzalo Jiménez Cuesta, uno de los titulares fundadores, se independizó del despacho profesional del insigne abogado, el lltmo. Sr. Don Juan Moya García. El bagaje por entonces de aquel joven letrado como mercantilista, y civilista, conocedor de la práctica jurídica bancaria resultó ser la semilla de un despacho de abogados en el que durante estos casi treinta años se han formado más de una decena de profesionales del derecho.

La conjunción y perfecta afinidad laboral con los otros titulares de Bufete Studium, Aníbal Tovaruela Garrido, abogado laboralista, y Francisco Campos Martínez de León, especialista en Derecho Administrativo y Derecho Fiscal, ha posibilitado la creación de los cimientos base de nuestra empresa.

Nuestra filosofía empresarial parte de unos firmes y sólidos valores, es decir, garantizamos auténtica CONFIANZA a todas aquellas personas que necesitan un asesoramiento legal. Esta CONFIANZA profesional ha de sustentarse forzosamente sobre tres pilares fundamentales:

LA CERCANIA, EL ESTUDIO y LA RESPONSABILIDAD.

La Cercanía

LA CERCANIA al cliente exige una proximidad intelectual al mismo y a su problema concreto, ese que le ronda continuamente la cabeza, que le mantiene atento, y en muchas ocasiones en alerta, algo que solo se consigue con unas inestimables dosis de empatía, de las que resulta en todo caso una atención personalizada e inmediata por parte de nuestro equipo, quien siempre se pondrá en el lugar de nuestro patrocinado.

El Estudio

Y con la cercanía, ha de llegar forzosamente EL ESTUDIO. El estudio es la pieza clave del asesoramiento legal, cuya raíz latina da nombre a nuestro despacho, y que debe suponer una aplicación absoluta al Derecho: “la atención concentrada para aprender un tema o resolver un problema del que se obtiene como resultado una investigación donde se han aplicado determinados métodos y conocimientos”.

Sin duda el estudio del jurista debe basarse en la investigación, lo que exige un pensamiento y meditación sobre el problema previos a la aplicación de método alguno; en segundo lugar, el empleo del conocimiento para, posteriormente, volver a deliberar sobre el problema en cuestión, una vez asumido el bagaje del mismo … Porque, en resumidas cuentas, ésta es parte de nuestra filosofía empresarial: el Derecho hay que pensarlo, estudiarlo, y volverlo a pensar.

La Responsabilidad

El tercer y último de los pilares que sustentan nuestro trabajo es la RESPONSABILIDAD del individuo porque, sin duda, la responsabilidad de los hechos ha de recaer inevitablemente sobre la persona que los protagoniza, pero el hecho jurídico ha de ser, a su vez, responsabilidad única del abogado, y así lo asumimos en nuestro despacho profesional.

Compromiso

Finalmente, estos tres valores, base de nuestra filosofía empresarial, vienen a desembocar en el resultado lógico de nuestro único lema como grupo letrado asesor, el del COMPROMISO, lo que supone contraer una obligación concreta que se documenta desde un primer momento para delimitar sus términos y evitar sorpresa alguna, pudiendo cada cliente en ese mismo instante, incluir el contenido de sus propias exigencias o condiciones.

Porque, así lo entendemos, en Bufete Studium el compromiso con el cliente es nuestro único lema y su confianza, nuestro principal objetivo.